Los pasillos de los grandes centros de compras en Europa o EE.UU. se están quedando vacíos. A la par, Payless, Sears y otras tiendas están cerrando, mientras ven el ascenso de los gigantes del comercio electrónico como Amazon. Pero la crisis de los centros comerciales aún no ha tocado las puertas en el Ecuador.
De hecho, el número de visitantes a estos establecimientos en el país creció en el 2018 respecto al 2017. Este indicador subió entre el 2 y el 8% en ese período, según varias cadenas consultadas por este Diario.
María Augusta Terán, jefe comercial de la cadena DK Managment Services, explica que, en general, el negocio de centros comerciales se viene fortaleciendo en la costa del Pacífico Sur. La firma maneja ocho centros comerciales en el país; entre ellos están, Quicentro Sur, San Luis, Granados Plaza, en Pichincha; o San Marino, en Guayas.
El movimiento de personas en los establecimientos de DK creció casi 2% entre el 2018 y el 2017. “Al cliente latino le gusta tocar el producto, que alguien le atienda; es decir, aún le gusta el contacto directo”.
Otro factor de este desarrollo es que el negocio se está reinventando en el país. Los establecimientos dejaron de ser solo un lugar de compras, para abarcar una amplia oferta de entretenimiento y servicios, de manera que los clientes vivan una experiencia. El Scala Shopping, por ejemplo, aprovecha su cercanía al Chaquiñán para que los clientes disfruten de mañanas deportivas.
Además, cuenta con un teatro y un área de restaurantes. “La finalidad es ofrecer a nuestros clientes actividades que aporten a su estilo de vida, talleres de nutrición, ‘master class’, yoga (…)”, dijo la firma, que cerró el año pasado con 15,1 millones de visitantes, 7% más que en el 2017. En otros como el Quicentro Sur se puede hacer trámites bancarios, del SRI, del IESS o notarizar documentos.
City Mall, en Guayaquil, y Village Plaza, en la vía a Samborondón, también apuestan por vender experiencias a sus clientes. En el segundo caso, por ejemplo, se realizan actividades culturales. Natalia Tamariz, gerenta comercial del establecimiento, asegura que las “actividades para los niños y shows musicales” son una invitación para que las familias se queden más tiempo.
En este centro se hicieron inversiones importantes el año pasado, como la remodelación del Cinemark, la ampliación de parqueo inteligente y se abrió un local de Sukasa, dijo Tamariz, aunque no reveló cifras. La cadena de Riocentros de Corporación El Rosado tiene cinco centros comerciales en Guayaquil, en la vía a Samborondón y en La Aurora.
Según la empresa, el año pasado las visitas en los centros comerciales de la cadena subieron 200 000 por mes. En total, 16,8 millones de clientes visitaron estas instalaciones. Y el Condado Shopping informó que está levantando una nueva plaza de parqueos. Las periferias también ofrecen oportunidades de crecimiento. DK está construyendo el Portal Shopping, en Carapungo, en el norte de la capital.
Miguel Chiriboga, gerente de la firma, no reveló la cifra de inversión, pero dijo que son “decenas de millones de dólares”. La obra tendrá 160 000 metros cuadrados de construcción, 200 locales, cuatro niveles de parqueaderos y un patio de comida para 1 700 personas. El centro comercial atenderá a unas 800 000 personas al mes durante el primer año. La expectativa es abrir el sitio en noviembre de este año. Sobre nuevos proyectos, la cadena informó que ha comprado algunos terrenos. “Estamos esperando que nos definan con qué proyecto arrancamos para el 2020”.
Entre ellos, hay uno en Santo Domingo, otro en Guayaquil y uno en proceso en Cuenca. La apertura de supermercados ayuda a medir la capacidad de consumo de una zona y puede marcar a futuro una referencia para levantar centros comerciales.
En Santo Domingo, por ejemplo, los supermercados se han ubicado estratégicamente para captar incluso clientes de parroquias rurales y de otras provincias. Doris Zambrano viaja desde la parroquia El Esfuerzo, en la vía a Quevedo, hasta El Coral cada 15 días para abastecerse de productos para su bazar. Ella señala que desde el 2017 compra en este lugar porque queda en la entrada de Santo Domingo y ya no tiene que ir a las abarroterías del centro. Cada semana reciben entre 5 000 y 10 000 clientes.
Según el estudio de mercado que El Coral realizó antes de instalarse en noviembre de 2016, Santo Domingo es una zona comercial donde convergen personas de unas cinco provincias. Akí, de Corporación Favorita, tiene dos locales. Uno en la vía a Chone y otro cerca a la terminal terrestre. Este último es el más grande y se ubica en una plaza comercial.
Fuente: Elcomercio.com