Auge de torres residenciales en la Gran Área Metropolitana (GAM) impulsa proyectos innovadores
Por César Brenes Quirós
A pesar de que el mercado residencial costarricense se ha caracterizado tradicionalmente por una marcada preferencia en la adquisición de viviendas horizontales, el auge de casas y apartamentos en condominios verticales dentro de la Gran Área Metropolitana (GAM) es síntoma de una nueva tendencia.
De acuerdo con datos recolectados por la consultora local, Cake Business Development (CBD), cerca del 35% de la población de la GAM que buscaba vivienda durante 2015 dijo preferir apartamentos en vez de casas o lotes, superando en 15 puntos porcentuales a la cantidad registrada en 2014.
Asimismo, aproximadamente la mitad de los proyectos de vivienda nuevos que surgieron entre 2014 y 2015 se dedicaron al nicho de torres de apartamentos.
“Este aumento en la construcción de vivienda vertical se debe a la disminución gradual de terreno para la construcción dentro de las urbes, la cual, encarece el valor de la tierra, y por lo tanto, el del proyecto”, explica José Pablo Quesada, gerente general de CBD.
En Costa Rica, los precios más demandados para las viviendas llegan a montos que oscilan entre los U$S 100.000 y los U$S 150.000, ubicadas principalmente en la capital costarricense San José. Sin embargo, Alajuela y Heredia continúan con una posición preferente entre los consumidores ticos.
Con frecuencia, este tipo de torres están dirigidas a un mercado de clase media, media-alta y alta. Datos aportados por el Banco Central de Costa Rica indican que en el cuarto trimestre de 2015, las viviendas de clase media continuaron perdiendo importancia en la construcción de obras residenciales, pues representaron el 40% del total de edificaciones residenciales, 5 puntos porcentuales menos que en el trimestre anterior, seguidas por las viviendas de interés social y de clase alta, las cuales aportaron un 25% cada una.
El sector vivienda es el más importante en la industria de la construcción tica, ya que en ese mismo periodo representaron el 55% del total de metros causados durante el trimestre.
Ambiciosos y especializados complejos
Ante una importante oferta, los desarrolladores locales están buscando diferentes alternativas para promocionar sus proyectos. Uso mixto, amenidades inusuales, edificios enfocados en nichos como el deportivo y de adultos mayores, entre otros forman parte de las estrategias.
Uno de los proyectos más ambiciosos es Torres de Heredia, anunciado en el 2014 como el complejo de apartamentos más grande de Centroamérica y localizado en la provincia de Heredia, prominente zona empresarial y residencial de la GAM. La obra, a cargo del Grupo Inmobiliario del Parque, inauguró en diciembre pasado la primera etapa con una torre de 12.000m2 que incluye 137 unidades habitacionales.
Como parte de esta primera etapa, también se inauguró una torre de parqueos de cuatro niveles con capacidad para 260 estacionamientos y la plaza comercial que mide alrededor de los 5.000 m2, ubicada al frente del mega proyecto.
“Ya se ha colocado el 90% de esta primera torre y en agosto del 2016 arranca la construcción de la segunda etapa de este innovador concepto urbano”, comentó el arquitecto Ricardo Molina, socio del Grupo Inmobiliario del Parque.
Torres de Heredia contará con 1.313 apartamentos y 12.000 m2 para comercio y oficinas. En total, sumará 86.900 m2 de terreno y 134.000 m2 de construcción.
La misma empresa también iniciará construcción durante este 2016 de Latitud Los Yoses, ubicado en el centro de San José. Se trata de un proyecto de 22 niveles y 24.000 m2 de construcción.
Otro destacado complejo es Hacienda Espinal en Alajuela, a cargo de la compañía Garnier & Garnier Desarrollos Inmobiliarios. Se trata de un proyecto residencial de 112 hectáreas que se cataloga como el primer desarrollo urbano del país que ofrece una solución integral de servicios e infraestructura, con servicios que promueven la sostenibilidad, cultura y calidad de vida.
“En su propuesta de diseño se fusionan de forma armoniosa distintos productos residenciales –desarrollados por etapas- (lotes, apartamentos y town houses), espacios comerciales y zonas verdes, áreas culturales y de recreación. Actualmente están construidas una casa club con piscina, una ciclovía y playgrounds, así como el parque escultórico Ruta de la Paz, creado por el famoso escultor tico Jorge Jiménez Deredia”, destacó Karla Quevedo, gerente comercial de la firma.
De vuelta en Heredia, durante el 2015 se anunció la llegada de la desarrolladora venezolana Inversiones Bolívar con su proyecto Sportiva Skyhomes, una alternativa de vivienda para las personas que practican deportes, se alimentan de manera adecuada y les gusta la meditación. Sportiva representa una inversión de más de U$S 10 millones en dos torres de 108 apartamentos de 1, 2 y 3 habitaciones. Piscina con carriles de nado, un gimnasio exterior e interior, saunas, salas de masaje, salas de juego y sendero para trotar son parte de las amenidades del atractivo proyecto.
Entretanto, otros proyectos habitacionales como Verdeza en Escazú, han nacido recientemente para enfocarse en el nicho de adultos mayores. El complejo, a cargo de la costarricense Verdeza, cuenta con 61 apartamentos y necesitó una inversión cercana a los US$10 millones.
La compañía estadounidense Omnia, encargada del que será el edificio más alto de Costa Rica: Torre 40, también desarrolla paralelamente el proyecto residencial Skala Flats en la zona de Rohrmoser, una de las de más alta plusvalía en San José. Se trata de 22 unidades, lounge, piscina y áreas que inician desde los 109 m2 y U$S 198.000. De acuerdo con Maybell Araya, gerente de ventas de Omnia, la obra comenzará en el segundo semestre del 2016, calculando aproximadamente 15 meses para su terminación.
Por su parte, la compañía Interra desarrolla el proyecto 101 Escalante, ubicado en el centro de San José en el llamado Barrio Escalante, otras de las zonas más buscadas por los ticos para vivir por su amplia oferta gastronómica, entretenimiento y cultura. El proyecto consiste en un edificio de 100 apartamentos con estilo retro en cuanto a arquitectura que contará con lobby con portero, ascensores panorámicos con vista al patio central, más de 30 parqueos comunes de bicicletas, bodegas, terraza BBQ, salón para eventos, rooftop bar con piscina temperada, entre otras.
Por su parte, la firma Vive continúa con la expansión de su cadena de complejos de apartamentos del mismo nombre dentro de la GAM. Su primera propuesta, Vive Sabanilla (San José este) ya está finalizando el desarrollo de su tercera etapa, mientras que el nuevo Vive Tibás (San José norte) inició construcción en diciembre pasado. Esta sede cuenta con un área de construcción de 22.040 m2, 151 unidades residenciales, 19 unidades comerciales.
En el centro de la capital, Q-Bo de la desarrolladora H Solís es una de las futuras obras más grandes con 298 unidades, al igual que Azenza Towers de Garnier & Garnier con 238 residencias.
Por otra parte, fuera de la GAM, las torres de apartamentos también empiezan a ser tendencia. De hecho, uno de los grandes anuncios del 2015 en el sector residencial fue el del grupo Calypso Developments, el cual inauguró la primera etapa de Condominios Parque del Caribe en la provincia de Limón. La primera parte de la inversión consta de dos torres de 48 apartamentos, pero el complejo dispone de 8 hectáreas de terreno, de las cuales 50% está destinado a bosques y senderos.